El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, representados en China por su hijo Laureano Ortega Murillo, continuó la exposición de la Ley de Zonas Económicas Especiales, con la que Nicaragua cederá prácticamente su soberanía nacional bajo la promesa de atraer inversión extranjera.
Los medios del sandinismo destacaron este martes la reuniones de la delegación nicaragüense en el marco de la Cumbre China-América Latina que se celebra en la ciudad de Zhengzhou, donde Ortega Murillo dijo un día antes que “todas las empresas chinas que se instalen bajo este régimen estarán exoneradas de todos los impuestos durante todo el tiempo que operen en nuestro país”.
Algunos de esos encuentros son con empresas que ya tienen negocios en el país. Entre ellas China Communications Services Corporation Limited (CCSI), a la que la dictadura le otorgó contratos para el desarrollo de sistemas informáticos estatales.
También se cuentan empresas ZMJ y HUAWEI, ambas de telecomunicaciones, que igualmente están en suelo nacional para impulsar inversiones en esta área, especialmente dado el apoyo chino para trabajar en el área de los ciberdelitos.
Intentos desesperados en China
No podía faltar una reunión con mineras, entre ellas GUOCHENG, después de que en el último año el régimen concedió más de 700 mil hectáreas para la explotación de minerales a empresas de ese país con dudosa reputación en este área. Por último lo hicieron con un fabricante de muebles, Kuka, la empresa de energía Wanbang y Red Dragonfly, de calzado.
Hace una semana, Ortega y Murillo entregaron a la Asamblea Nacional la Ley de Zonas Económicas Especiales que aprobó el Legislativo de forma exprés al día siguiente. El instrumento exonerará a las empresas chinas que se establezcan en Nicaragua por tiempo indefinido.
Expertos y economistas señalan que con ello buscan intentar contrarrestar la posible suspensión del país del Tratado de Libre Comercio DR-Cafta, una decisión que anunciará Estados Unidos el venidero mes de diciembre.
En China se encuentran, además de Laureano Ortega Murillo, Fernando Sánchez, director de la Comisión de Zonas Francas; Karina Mejía, directora de la Secretaría de Inversiones y Exportaciones; y Ramiro Cruz, embajador de Nicaragua en China.